Festival de la Roja (4 - 0)

España venció con comodidad a Irlanda por 4-0 haciendo un grandísimo  y completo encuentro en el que Fernando Torres fue el gran protagonista de un triunfo que deja a la roja con el pase a cuartos casi encarrilado.

Del Bosque puso en el equipo titular a un nueve, la demanda de medio país, y escogió a Torres. El del Chelsea tardó cuatro minutos en reivinidicarse. La defensa le robó un balón a Silva y Torres, atento, lo recuperó para fusilar al meta Given. Un golazo que le sirvió al delantero para reivindicarse y silenciar a todos los que habían dudado de él. Pero, sobre todo, le valió a España para encarrilar una victoria necesaria de cara a su futuro en la Eurocopa.

Ese 1-0 abrió el telón de una primera parte en la que la roja hizo lo que quiso con una Irlanda que no sabía como frenar el juego de toque español. Silva, Torres, Piqué, Xabi Alonso, Xavi y hasta Arbeloa tuvieron ocasiones para marcar. El gol era lo que le faltaba a una selección que estaba creando escuela con su fútbol vistoso, de toque, de combinaciones cortas en las que Iniesta es el rey y así se lo reconoció el público que le brindó una ovación de escándalo tras realizar una de sus habituales acciones de maestro.

España mandaba en todo el campo. No pasaba apuros en defensa, el balón era suyo y las ocasiones, por supuesto, también, pero ninguna de ellas se convertía en ese ansiado segundo gol español. Así  las cosas, el partido llegó al descanso con ese 1-0 de Torres en el minuto cuatro.

En la reanudación, España seguía mandando y esta vez sí que encontró el gol rápido. El autor fue David Silva en el minuto 48 de partido. Recogió un rechace del meta a disparo de Iniesta, bajó el balón, lo acomodó, engaño a los defensas y de un disparo colocado puso el 2-0. España no se relajó y siguió acosando a la meta de unos irlandeses que no sabían como frenar el vendaval que estaban sufriendo.

El tercer gol español parecía que iba a llegar pronto. Xavi y Busquets lo tuvieron en sus botas, pero se resistía. España bajó un poco el pistón e Irlanda lo aprovechó para llegar con peligro a balón parado. Pero fue un espejismo porque en el minuto 70, Torres aprovechó un pase largo de Silva para marcar su segundo gol y poner el 3-0 en el marcador.

El encuentro estaba más que finiquitado y Del Bosque aprovechó para dar entrada a Cazorla, Javi Martínez y Cesc, que jugó como delantero centro y que marcó un golazo en el minuto 83 que significaba el 4-0 con el que se acabó el partido.

Ahora, España se jugará ante Croacia el primer puesto de este Grupo C.

Todos los goles del partido España - Irlanda (4 - 0)

Polonia sobrevive a Rusia

El partido más intenso de la Eurocopa finalizó y Rusia sobrevivió en un encuentro con tintes bélicos porque Polonia planteó el partido como una guerra. Los anfitriones salieron exhibiendo una agresividad que trata de maquillar una defensa de papel y una delantera miope. Rusia administró con cierto desasosiego los primeros minutos. El mediocampo ruso se veía desbordado por la intensidad polaca. Denisov y compañía no hilvanaban juego y Polonia creaba ocasiones con su fútbol tenso. Un testarazo de Boenisch, un disparo de Lewandowski y un gol bien anulado a Polanski encendían las alarmas rusas. Pero como ocurrió ante Grecia, pasada la media hora los polacos se desinflaron, y Rusia enfrió el balón. Apareció la medular del Zenit y de los zarpazos de Kerzhakov se pasaron a las apariciones de Arshavin. Y entonces un balón parado desnudó, de nuevo, la ternura defensiva local. No es recomendable plantear batallas si defiendes tu retaguardia con tirachinas como hace Polonia. Dzagoev, que se postula como jugador del torneo, peinó el balón a la red, impactando en la línea de flotación polaca. Al descanso el veredicto dictaba un tocado, pero no hundido.

En el inicio de la segunda mitad quedó de manifiesto que Polonia es tan intensa y vertical como timorata. Lewandowski ganó la espalda rival varias veces, pero le faltaron cómplices. Rusia tocaba y subía líneas llegando al área con laterales, extremos y volantes. Y en una de esas la pelota le cayó en la izquierda al diestro Blaszczykowski, que instintivamente soltó un latigazo que entró como un obús. 

Polonia jugaba con el corazón, Rusia lo hacía con la cabeza, o quizás también con la calculadora. La efervescencia polaca propuso un intercambio de golpes que Rusia admitía a regañadientes. Un taconazo precioso de Arshavin para Dzagoev, rozó la tragedia en Varsovia. Polonia se revolvió con un zarpazo y luego con otro y después un tercero. El empuje de un equipo pequeño ante la frialdad de uno grande. Un empate que permite a Polonia, que aún no ha perdido, pasar empatando con los checos, a los que lastra la goleada ante Rusia. Los de Advocaat, sin embargo, están virtualmente clasificados, aunque han evidenciado que la intensidad no es uno de sus fuertes. Sobrevivió Rusia y Polonia murió matando.

Resumen Polonia - Rusia (1 - 1)

Clasificación Grupo A:

CLASIFICACIÓN	PTOS	PJ	PG	PE	PP	GF	GC	(Dif)
Rusia	4	2	1	1	0	5	2	(+3)
R. Checa	3	2	1	0	1	3	5	(-2)
Polonia	2	2	0	2	0	2	2	(0)
Grecia	1	2	0	1	1	2	3	(-1)

La República Checa le gana a Grecia ante un fallo de Cech

Primer triunfo de la República Checa en la Euro que le permite sumar cuatro puntos en la clasificación. No obstante, esa victoria frente a una Grecia caótica y débil la obtuvieron por el camino más complicado posible y eso que, a los cinco minutos, ya ganaban por 0-2. Un histórico error del portero del Chelsea, Peter Cech, que le será recordado siempre, y la decisión del conservador técnico checo, Michal Bilek, que retiró en el descanso al mejor Rosicky, animaron un poco la segunda mitad. Ocurra lo que ocurra en el Polonia-Rusia, todo quedará en el aire para la última jornada.

Un pase magistral de Hubschmann rompió a la defensa griega de lo que se aprovechó Jiracek (3'). La salida desesperada del meta Chalkias no lo pudo impedir. Ese gol afectó al portero ya que, dos minutos después, una subida por el lateral derecho de Gebre Selassie no la pudo desviar bien y  acabó con 'pase de la muerte' para el goleador Pilar (ya lleva tres).

Grecia se derrumbó al punto que Chalkias solicitó el primer cambio del partido (21') por lesión. Era el colmo para los pupilos de Fernando Santos quien se encomendó a Salpingidis como solución final. El 0-2 les sirvió para adueñarse del balón aunque fue más por conformismo checo. Ni así pudieron inquietar demasiado a Cech quien se 'reservaría' para la segunda mitad. El trabajo de Rosicky y Plasil, junto a la movilidad de Jiracek, dio buena renta.

Claro que nadie podía esperar que el técnico checo, Michal Bilek, diera tantas facilidades al sustituir a Rosicky, por Kolar. El entrenador pensó más en el siguiente y definitivo partido contra Polonia que en rematar la faena en este segundo.

Cech le ayudó a ponerse de los nervios con un error del que no se olvidará nunca. No sólo es inhabitual ver a Cech cometer errores sino que cuesta aún más asimilar una pifia semejante: un balón inocente se lo rifaron él y su defensa Sivok. Uno por el otro, el meta del Chelsea se le regaló a Gekas para desespero de todos los chechos.

La parte positiva del partido hay que buscarla en que tanto la Rep. Checa (4 puntos) como Grecia (1 punto) podrían tener posibilidades en su último partido de clasificación frente a Polonia y Rusia, respectivamente.

El seleccionador checo, Michal Bilek, ha declarado que echaron en falta a Rosicky aunque lo retiró porque puede haberse lesionado. "Hemos echado de menos su creatividad en la segunda parte, cuando nos estaban presionando. Esperemos que se pueda recuperar pronto.

Resumen de República Checa - Grecia (2 - 1)